martes, 7 de julio de 2009

Ante las últimas declaraciones del Ministro de Salud de la Nación expresamos nuestra preocupación.
Declaración del Área de Salud de Barrios de Pie.
Los sistemas de salud son funcionales a los intereses de un proyecto de país, y expresan en sus definiciones, la disputa por los diferentes modelos de ese país.
Como dijera Ramón Carrillo, Primer Ministro de Salud de la Argentina: “las alternativas para conseguir la salud no pasan exclusivamente por la recuperación, ni aun por la promoción, pasa por todo aquello que hace a la riqueza social que da trabajo, da salario, que da la vivienda, que da poder al pueblo.”
Las últimas declaraciones del nuevo Ministro de Salud son un traslado fiel de las Políticas focalizadas y para pobres implementadas en los 90.
Ese modelo de país neoliberal profundizó un sistema de Salud fragmentado, heterogéneo y desigual, basado en el negocio y la enfermedad. Entendemos que para desandar este camino en la búsqueda de alternativas para modificar las condiciones que limitan la vida y por la recuperación del derecho a la Salud, debe tener necesariamente por ejes transversales a la indispensable renovación política que rompa con el clientelismo, el fortalecimiento de la organización y participación comunitaria y la integración solidaria con cobertura universal del sistema de salud en todas sus jurisdicciones.
Abordar integralmente el escenario actual planteado entre el pánico por la Influenza A H1N1 (gripe porcina), los negocios farmacéuticos (con un antiviral que cuesta mas de $200 y no se distribuye equitativamente) y los problemas de salud, es una tarea inapelable que difícilmente se pueda concretar financiando al sector privado justo cuando, ante una nueva situación de crisis sanitaria (con coletazos del dengue presentes aún) el sector público viene dando sobradas evidencias de su capacidad.
Flaco favor hace el Ministro de Salud de la Nación a la salud Colectiva evitando definiciones sobre la emergencia sanitaria y apelando a supuestas respuestas iniciadas durante la crisis del 2002.
Señor Ministro, no fue el acuerdo con las farmacéuticas y los centros de salud lo que facilito la llegada del medicamento a los barrios, sino la extendida respuesta de promotores de salud que de la mano de las organizaciones sociales se organizaron en el barrio, desde el desempleo, con la participación de miles de mujeres, la capacitación en los comedores donde fuimos pesquisando con la talla y el peso el hambre de nuestro pueblo y donde, junto a muchos profesionales solidarios y sindicatos comprometidos, ensayamos respuestas desde nuestras necesidades.
Nuevamente en el Hospital público y las salas de atención primaria se canalizan la mayor cantidad de consultas y desde allí se deben articular las mejores respuestas. Y por ahí no pasan las respuestas. Por ejemplo en una de nuestras postas sanitarias del asentamiento Barrio Libertador con trabajo de promotores de salud y médicos, la realidad es acuciante en cuanto a que no solo los hospitales no aplican el protocolo de acuerdo al grado de gravedad, sino que se agrava por la vulnerabilidad habitacional, nutricional y la coexistencia de otras enfermedades anteriores a la gripe como la bronquiolitis o la tuberculosis, para mencionar algunas.
La emergencia sanitaria nacional retaceada por Ud. es una apuesta más a debilitar el sistema público con vocación integral que miles de argentinos/as en los barrios defendemos y luchamos por transformar con participación y organización popular.
AREA DE SALUD
MOVIMIENTO BARRIOS DE PIE